Al referirnos al género musical, aludimos a todas aquellas producciones cinematográficas cuya temática gire en torno o se manifieste a través de expresiones musicales que incluyan canciones o temas bailables como parte fundamental de su desarrollo dramático.
En su totalidad, las variantes del cine musical tienen una raigambre teatral cuya característica genérica es una puesta en escena de coreografías que toma como sitios principales para desarrollarse el teatro, el cabaret, o la calle.
Este apremio forma parte intrínseca de la trama, de tal modo que la música y los bailes avanzan en conjunto con la intriga. Los musicales versan alrededor de cualquier moda bailable cuya adaptación al cine contribuye a popularizar entre el público todas esas fórmulas escenográficas.